Abandono post apagón: el caso de la Oficina de El Entrego
El apagón eléctrico generó una serie de problemas en las oficinas que, mal que bien, vamos solucionando una vez que al día siguiente se recuperaron la energía eléctrica y las comunicaciones, imprescindibles para el funcionamiento normal y el trabajo diario.
Es obvio que tanto el apagón como los problemas posteriores no son en absoluto achacables a la dirección de Unicaja, pero donde si tienen una responsabilidad directa es en las decisiones (o la falta de ellas, como en el caso que nos ocupa) derivadas de los problemas graves generados por esta situación.
La oficina de El Entrego, una de las más importantes de Asturias, enclavada en el corazón de la cuenca minera de el Nalón, no ha recuperado las comunicaciones desde la fecha del apagón, encontrándose absolutamente inoperativa hasta el momento.
Como es normal, el cabreo entre los clientes es como para escribir tangos y la situación de los compañeros que trabajan en la oficina es desesperante, sabiendo lo que esto supone y lo que va a suponer en un futuro próximo
Lo lógico sería que, una vez constatado que, al contrario que en el resto de las oficinas, en El Entrego no se recuperaba el servicio a pesar de las reclamaciones a Telecable, la dirección comercial de Unicaja, al nivel que sea necesario (Zona, Territorial, Dirección General) para esta toma de decisiones, en coordinación con Recursos Humanos, hubiera tomado una serie de medidas de manera urgente y expeditiva, que transmitiera a nuestros compañeros y a nuestros clientes la sensación de que no se les ignora, Esas iniciativas, podrían, entre otras, ser las siguientes:
Informar de manera oficial, mediante carteles en la oficina y publicidad en los medios de comunicación de la comarca, de la situación generada, explicando a qué se debe y pidiendo disculpas por las molestias causadas.
Anunciar que se va a reforzar la plantilla de las oficinas cercanas (y, ya para nota, que sea verdad, mediante la redistribución de los compañeros de El Entrego mientras no se resuelva el problema) para afrontar el incremento del trabajo generado por la situación.
Anunciar igualmente que en dichas oficinas y, como mínimo hasta que se resuelva este problema, se deroga esa estúpida medida de cerrar el servicio de caja a las 11,30.
Medidas sencillas y de muy bajo coste que podrían ayudar a paliar los problemas que ya tenemos y los que vamos a tener en el futuro y que, sobre todo, que sufren y van a sufrir los compañeros afectados por este asunto.
Para nuestro relativo asombro, ni carteles ni información oficial, ni refuerzo de la plantilla, ni ampliación de horarios de atención en caja, ni nada de nada.
Al contrario, son los compañeros los que han tenido que elaborar a mano un cartel para informar a los clientes.
Para más inri, lejos de reforzar la plantilla, mañana viernes un compañero de una oficina cercana pequeña e infradotada que recibe mucho del trabajo que se hace habitualmente en El Entrego va a tener que desplazarse a otra oficina distante para cubrir vacaciones.
Y de lo de ampliar el horario de caja, ni hablar.
Eso sí, las pantallas de los cajeros muestran la información genérica de fuera de servicio también en inglés, cosa que tanto en el Entrego como en el resto de Asturias es muy de agradecer, por ser el idioma que utilizamos en el día a día los asturianos.
El liderazgo no se demuestra aplicando el reglamento mecánicamente y presionando para que se cumplan sí o sí exigencias inalcanzables que no distinguen las peculiaridades de cada territorio o de cada localidad.
Para eso vale cualquiera.
El liderazgo se demuestra cuando hay problemas y hay que tomar decisiones urgentes.
Justo lo que no se está haciendo ahora respecto a la situación de la oficina de El Entrego.
Y, ya para nota, el liderazgo se demuestra poniendo el cuerpo, personándose desde el primer momento en el lugar de los hechos y anunciando medidas como esas en vivo y en directo.
Esperamos que, si mañana viernes no está operativa la Oficina de El Entrego, se tomen de inmediato medidas como éstas o similares, no porque lo diga la CSI, sino porque son de sentido común.
Y que sirva de experiencia para situaciones similares.
A ver.
01 de mayo de 2025
P.D.: con motivo del apagón y para nuestra (muy relativa) sorpresa, hemos visto en la prensa a quien liquidó y hundió la Caja de Ahorros de Asturias posando de Prócer de la Patria Eléctrica ya que, al parecer, goza de una nueva canonjía (trabajar es otra cosa: lo que hacemos nosotros, por ejemplo) en ese turbio mundo de las puertas giratorias de las eléctricas, donde se lo sigue llevando calentito sin ningún decoro.
Como a muchos compañeros y gente del común que no se tragó la obscena campaña de autobombo en los medios financiada con nuestro dinero, la reflexión fue obvia: con personajes como estos dirigiendo las empresas eléctricas, pocos apagones tenemos.