25 septiembre 2012

¿La Hora de la Verdad?

La dirección no publica esta circular alegando (textual) lo siguiente:
 En relación con la Circular que se ha entregado para su inserción en la intranet, les comunicamos, que la entidad entiende que dado su contenido, la misma puede ser ofensiva, por lo tanto no se procederá a su publicación.
 
¿ Puede ser ofensiva? Creíamos (ingenuos de nosotros) que ofensivos son los sueldos obscenos de algunos en comparación con los recortes salariales que esos mismos nos aplican a los demás y que ofensiva es la privatización de las Cajas y el atraco a mano armada que eso supone a beneficio de quienes todos sabemos. Ya veis cuan delicado es el cutis de los ejecutivos agresivos.



¿La Hora de la Verdad?

A la espera de que conozcamos de manera fidedigna los resultados de las auditorias sobre las necesidades de capital de las entidades financieras y el resultado final de este nuevo proceso de fusión/privatización  en el que nos encontramos embarcados, nos planteamos y te planteamos las siguientes cuestiones que consideramos pertinentes, más aún cuando analizamos el lamentable nivel del patético argumentario (por llamarlo de alguna manera) que la dirección nos remite al respecto:

¿Será hora, por fin, de que sepamos en cifras concretas cuánto nos han costado algunas geniales iniciativas de nuestro presidente cuyo resultado, no cabe ninguna duda, ha contribuido a incrementar las necesidades que ahora se nos presentan o seguirán contándonos que todo esto es culpa de una crisis que, al parecer, no tiene responsable conocido?

¿Será hora por fin de que sepamos cuánto nos costó la genial iniciativa del Banco de Agentes que, según los propagandistas del régimen, iba a revolucionar el mundo financiero y que, sin haber tenido nunca ni un solo cliente (a pesar de lo cual declaraba beneficios, lo que sí se puede considerar de alguna desfachatada manera como una novedad reseñable en el mundo de las finanzas), acabó siendo Banco Liberta, herramienta que se utilizó para la operación de compra de CCM ?

¿Será hora también de que sepamos cuánto nos costó poner en manos de Infocaja la gestión y el desarrollo de nuestros procesos informáticos que realizaba nuestro Centro de Proceso de Datos? ¿Podremos saber igualmente cuál es la cifra de beneficio derivado de esta decisión presidencial que está consiguiendo año tras año la multinacional Accenture por su manifiestamente mejorable gestión de dichos procesos informáticos?

¿Será ya la hora de que sepamos por qué nuestra Caja se hizo cargo, Banco Liberta  mediante, del pufo de CCM, cuánto dinero llevamos enterrado en semejante muerto irresucitable y qué supuesto beneficio podría revertir en nuestra entidad una vez asumido semejante chollo? ¿Sabremos también si lo que se buscaba no era ni de lejos un beneficio para nuestra Caja, sino reforzar la posición de quien la dirigía en los procesos de fusión/privatización que estaban por venir?

¿Será el momento de que sepamos lo que llevan cobrados en informes, contrainformes, sugerencias y recados varios las distintas asesorías externas que, entre otras lindezas, elaboran esos sesudos informes al gusto del cliente que indican, seguramente por casualidad, que nuestros salarios deben ser recortados (por motivo de estricta justicia retributiva, obviamente) tanto ahora, con la manida crisis, como hace años, cuando los  beneficios batían records históricos según la prensa del régimen?

¿Será, por ventura, hora de que sepamos lo que llevan cobrados nuestros directivos (Presidente y Director General sobre todo) desde que accedieron a sus puestos? Y puestos a soñar ¿Sabremos también cuanto se han embolsado en los diferentes puestos a los que han llegado gracias a nuestra Caja?

Además de estas preguntas, también creemos que la situación actual hace obligatorio que los trabajadores nos planteemos la siguiente reflexión:

En 1995, cuando el actual Presidente llegó a su cargo (que debería haber abandonado en 2003 según los estatutos en vigor en aquel entonces) los asturianos teníamos una Caja con cien años de historia que cumplía con su papel de entidad financiera de referencia para la mayoría de los asturianos, generaba empleo estable y dignamente retribuido y presentaba un futuro razonablemente asegurado. Hoy la situación de nuestra entidad es la que es, sobre el empleo y las retribuciones, mejor no hablar, y del futuro, ya sabes lo que hay. En curioso contraste con este estado de cosas, parece que quienes nos llevaron a esta situación gozan de un status económico y social que nunca hubiese alcanzado, ni de lejos, en situaciones normales. 

¿Qué te parece todo este disparate?

A nosotros, imagínate



Seguiremos informando.

25 de Septiembre de 2012