08 febrero 2017

¿Nos venden al Banco Sabadell?



“Crónica de un desastre anunciado: cierres y cambios en oficinas, política comercial, plan de excedencias…. La dirección de Liberbank sigue liquidando Cajastur”

¿Nos venden al Banco Sabadell?

En una reunión mantenida el 31 de enero entre dirección y sindicatos de Banco Sabadell, los directivos comunicaron que “iban a comprar Liberbank”.

Hasta ahora, no hemos dado ningún tipo de difusión a los múltiples rumores sobre posibles operaciones de venta de la entidad ya que, al basarse únicamente en charlas informales o conversaciones de pasillo, no creíamos conveniente alimentar una polémica que nos generase a los trabajadores más incertidumbres, a añadir a las ya creadas por la nefasta gestión y el desquiciado modelo de dirección de Manuel Menéndez y su equipo de pseudodirectivos arrogantes y prepotentes con trabajadores y clientes y serviles y genuflexos con su amo.

A estas alturas, y una vez destapados los propósitos de la dirección del Sabadell, desde la CSI consideramos que permanecer callados respecto a este transcendental asunto sería una muestra de irresponsabilidad sindical que no nos podemos permitir.

Para nadie es un secreto que Liberbank se ha convertido en un circo de ocho pistas en el que, después de un terremoto y en pleno incendio de la carpa, los saltimbanquis le han arrebatado su propiedad al dueño, los payasos se dedican a redactar delirantes planes comerciales sin pies ni cabeza, los gorilas se han fugado de su jaula para atacar a trabajadores y clientes y el mago se dedica a sacar apolillados conejos de su raída chistera en forma de estadísticas y contabilidades trucadas sin conseguir ya los aplausos que antiguamente (a tantos euros la palmada) le prodigaba un público generosamente subvencionado.

Tampoco es un secreto para nadie que difícilmente saldremos de este año sin una operación corporativa en que seamos adquiridos por alguno de los grandes bancos, ya que la nefasta gestión del equipo directivo de Liberbank (antiguo equipo directivo de Cajastur) no deja ninguna otra opción razonable.

La magnitud del desastre de los últimos meses no puede tener otra explicación que la ejecución de un plan pactado entre la dirección de Liberbank y alguno de esos bancos, o bien el seguimiento de las directrices de alguna de esas consultoras de nombre largo y pomposo y prácticas muy discutibles que, a cambio de una buena cantidad (será por dinero? Ya nos han quitado más de 350 millones de euros gracias a los ERES fraudulentos), aconseja sobre cómo desmantelar lo que fueron nuestras cajas para ponerlas en venta en las condiciones más favorables para quienes llevan tiempo preparando un pelotazo desde el accionariado de Liberbank.

Como en el caso de las viviendas, quieren ofrecer Liberbank “sin bicho dentro”. El bicho, obviamente, somos los trabajadores, la clientela que según ellos no merece la pena y cualquier compromiso con las regiones de origen de las cajas que obligue a mantener Obras Sociales y Culturales (la de Asturias ya la han liquidado). 
  
La posible compra por parte del Banco Sabadell supondría, en Asturias, una verdadera masacre en términos de empleo y nos llevaría, sin ninguna duda, a una reconversión brutal en la que, siendo el Sabadell el comprador y nosotros los comprados, no parece muy difícil adivinar quienes llevarían la peor parte en este proceso.

El Banco Sabadell/Herrero es la segunda entidad, después de Cajastur/Liberbank, en Asturias. A finales de 2014 (últimas cifras desagregadas por provincias conocidas) tenía en Asturias 145 oficinas y en torno a 670 empleados.  

Cajastur/Liberbank tenía, a 31/12/2015, 186 oficinas y 1.100 empleados en Asturias. En muchos casos, ambas entidades tenemos oficinas en los mismos pueblos y en las mismas zonas de las ciudades.   

Por el contrario, Caixabank, otro de los grandes bancos (mucha mejor opción en todos los sentidos) que ha sonado como posible comprador de Liberbank, tenía, a finales de 2015, 70 oficinas y 265 empleados en Asturias. Al parecer, el escollo para la compra por parte de Caixabank residiría, una vez más, en las ambiciones desmesuradas de la cúpula directiva de Liberbank.

Con estos datos, que nos vendieran al Sabadell sería la traca final, con nivel de bomba atómica, de una serie de intolerables atropellos que, con la complicidad de los partidos y sindicatos del régimen, comenzaron desde el mismo momento en que el actual consejero delegado de Liberbank fue aupado a la presidencia de la entonces Caja de Ahorros de Asturias por José Ángel Fernández Villa, capo del SOMA UGT, mandamás del PSOE y vicediós en Hunosa y chiringuitos adosados.

Por nuestra parte, en la actual situación, callar sería una actitud imperdonable. Tenemos la obligación de denunciar esta operación y poner todas las trabas posibles a su consumación. 

Por la cuenta que nos trae a todos.

Sin ningún pesimismo y sin alarmismos innecesarios.

Con la convicción de que los canallas no van a ganar siempre y que hay que apostar al optimismo organizado y combativo, sin dar ninguna batalla por perdida. 

En ello estamos.

8 de febrero de 2017

P.D. : Hay quienes nos reprochan que desde la CSI hablemos de Asturias y dicen que hay que hablar ya “en clave de banco” (sic).

Qué pena que los salarios no vayan también en esa “clave de banco”.

En Asturias hemos sido objeto de la estrategia de Menéndez (al obrero y al gorrión, perdigón) y sus cómplices sindicales desde hace muchos (demasiados) años. Somos el único territorio en el que, gracias al acuerdo del 25/01/99 los atrasos de dos años de revisión de convenio suponen cantidades que, en muchos casos, no llegan a 10 euros y somos el único territorio que, gracias a lo mismo, tiene paga y media menos al año.

Por otro lado, el no hablar en “clave de banco” no ha impedido que en Asturias haya sido, con mucho, el territorio que más ha peleado contra los ERES fraudulentos que nos afectan a todos los trabajadores de Liberbank y ha sido parte fundamental en la anulación del primer ERE y de las medidas previas implantadas unilateralmente por la dirección, que, de confirmarse por parte del Tribunal Supremo, supondría la devolución de 70 millones de euros que nos quitaron.

Por tanto, desde la CSI seguiremos peleando desde Asturias por los derechos de los compañeros a los que representamos, sabiendo que es la mejor manera de pelear por todos los trabajadores.