Visto
para sentencia el ERE fraudulento actualmente en vigor
Hoy ha tenido lugar en la Audiencia Nacional la vista
de las demandas presentadas por CSI, APECASYC y CSICA contra el ERE fraudulento
actualmente en vigor firmado, como es habitual, de
espaldas a los trabajadores por esa extraña (o no tanto) pareja de hecho y de
deshecho que forman la dirección de Liberbank y ese extravagante conglomerado de
sindicalistas dispuestos a avalar la política de recortes injustificados e
injustificables desarrollada por dicha dirección.
Como
demandados figuraban la empresa y sus mariachis sindicales (CCOO, UGT, CSIF,
STC/CIC y la Candidatura Independiente de Servicios Centrales de Asturias y
Oficina Principal de Oviedo)
Nuestra demanda para solicitar la nulidad de este
nuevo ERE se basa en distintas irregularidades del proceso negociador que ya
habíamos denunciado en el mismo momento en que se produjeron (conformación de
una mesa negociadora a la medida de los intereses de la dirección, falta de
entrega de documentación contable solicitada por nuestro sindicato, irrespeto a
los plazos de negociación contemplados en la legislación, ausencia de una
negociación real limitándose, una vez más, a efectuar una pantomima de
negociación) y en la ausencia de una causa económica real que justifique las
medidas recogidas en el ERE, que, por parte de la dirección, pretende acreditarse
mediante su afamada teoría de las cuentas elásticas y reversibles (como los calzoncillos
Abanderado de nuestra infancia) que, en función de los intereses de dicha
dirección pueden, tomadas en un mismo momento, arrojar magníficos beneficios
que avalen la buena gestión del equipo directivo o presentar tremebundas pérdidas
que obliguen a continuar con los recortes a los trabajadores (muy a pesar de
las benéficas intenciones de esa alta dirección que, como es sabido, se desvive
por asegurar nuestro futuro y nuestros puestos de trabajo).
Un tanto
sobreactuado, el abogado de la dirección llegó a afirmar en varias ocasiones
que, si conseguíamos anular este ERE, Liberbank se encontraría en una situación
“dramática”. También halagó la “responsabilidad” de los sindicatos firmantes y,
en las ocasiones en que tuvo que referirse a la CSI, no dejó ninguna duda de
que no nos tiene presentes en sus oraciones y de que no somos el tipo de
sindicalistas que le agradan.
Obviamente,
el sentimiento es mutuo y para estos sindicalistas asilvestrados y “poco responsables”
(quiera esto decir lo que quiera decir) que militamos en la Corriente Sindical
de Izquierda, es motivo de orgullo y satisfacción que quienes se ganan la vida
opíparamente con los recortes, los ERES y los despidos de trabajadores no estén
de acuerdo con nuestra manera de actuar. Lo contrario sí que nos preocuparía.
Particularmente llamativa fue la intervención de los
abogados que representan a los sindicatos firmantes cuyo argumento central para
defender este nuevo ERE es que los recortes contenidos en él son menores que los
contenidos en los ERES anteriores.
Como se
ve, el nivel conceptual y discursivo de estos profesionales de la firma de ERES
degenera por momentos. Antes debíamos estarles agradecidos porque, según ellos,
habían evitado nuestros despidos firmando recortes brutales y ahora, debemos
agradecerles que nos recortan menos que nos recortaron antes. Increíble, pero
cierto.
Al
parecer, en el reparto de las tareas derivadas del nuevo ERE, a los últimos
incorporados al grupo de sindicalistas “responsables” les corresponde arropar a
la dirección en estos trances judiciales, por lo que un nutrido grupo de
delegados de STC-CIC estuvieron presentes en el juicio para defender este nuevo
ERE fraudulento cuyas ventajas, como es sabido, confían en que podamos entender
los trabajadores (a pesar de nuestras limitaciones) con el transcurso del
tiempo, a pesar de que ellos las entendieron en cinco minutos, tras analizar
detenidamente y concienzudamente las cuentas presentadas por la dirección.
Por nuestra
parte, estuvimos una vez más en los tribunales defendiendo los derechos de
todos los trabajadores, cumpliendo con nuestra obligación como sindicalistas y
orgullosos, como siempre, de poder hacerlo.
Como hemos
afirmado en ocasiones similares y, sin prejuzgar el sentido de la sentencia que
dicte la Audiencia Nacional, desde la CSI no estuvimos en el juicio de hoy para
que nos digan si este nuevo ERE es una estafa o no es una estafa, cosa que
sabemos de sobra.
Hemos
estado en la Audiencia Nacional para intentar demostrar que esta nueva estafa
es ilegal y que la dirección de Liberbank y sus cómplices sindicales ni
siquiera han respetado las condiciones que una legislación absolutamente
contraria a los trabajadores, como es la reforma laboral, impone para que una
empresa pueda promover un ERE.
A la
espera de sentencia, a seguir en la pelea.
Por la
cuenta que nos trae a todos.
12 de diciembre
de 2017