Una sospechosa y maloliente maniobra
(otra más) de la dirección y sus cómplices sindicales que, de nuevo,
siguen tomándonos por idiotas a los
trabajadores
Para
mañana jueves está convocada otra reunión en Madrid de la que, según
adelantaron en la celebrada el martes, la dirección quiere salir con la firma
sindical de esa extraña propuesta de pago aplazado (muy aplazado, para ser
exactos) a los trabajadores actualmente en activo de la devolución de lo
ilegalmente descontado mediante el primer ERE fraudulento que fue anulado
gracias a las demandas de la CSI.
En
este circo de ocho pistas que resulta ser la gestión de la dirección de
Liberbank, la extravagancia de esta nueva iniciativa se agudiza con el
protagonismo desaforado de quienes, habiendo sido condenados por ser
coparticipes en todo este maloliente asunto de los ERE fraudulentos, se erigen
en defensores de los mismos compañeros a los que han traicionado una y otra vez
(en Asturias, desde el acuerdo del 25 de enero de 1999).
Que
la UGT de Liberbank, con su amplio currículum de mentiras, agachadas y
falsedades, se dedique a difundir las circulares que le preparan los asesores
legales de la dirección, alardeando del trabajo realizado (vaya, el corrector
nos indica que es incompatible que en el mismo párrafo figuren los términos UGT
Liberbank y trabajo, qué cosas estas de la inteligencia artificial!) y pretenda
convalidar ahora sus continuas trapisondas con esta maniobra de última hora
traspasa su habitual nivel de patetismo, ya muy elevado en condiciones normales
y, al parecer, inagotable.
El
lunes pasado salimos de la reunión sin ninguna propuesta por escrito y con la
vaga definición de lo que dicen que quieren hacer: ofrecer a los compañeros en activo la posibilidad de devolver lo
ilegalmente descontado con el ERE fraudulento anulado gracias a las demandas de
la CSI mediante el establecimiento
de un complemento salarial durante el resto de su vida laboral.
En
esa misma reunión, la dirección manifestó que quería el posible acuerdo firmado
para el jueves próximo y, ante la solicitud de la CSI de que se nos
proporcionase un borrador con la propuesta concreta, con datos y cifras,
previamente a la reunión del jueves para poder analizar qué era exactamente lo
que se nos pedía que firmásemos, dio la callada por respuesta.
Como se ve, la dirección y sus cómplices
habituales ya tienen preparado un amaño y la campaña mediática correspondiente
para, como siempre, vender las supuestas virtudes de esta nueva trapacería
directivosindical.
En
la anterior reunión, el representante de la dirección nos obsequió con estos
extravagantes argumentos, ante los que llegamos a dudar si estaríamos siendo
objeto de una broma televisiva con cámara oculta:
La
dirección no quiere ni puede (según ellos) pagar de una sola vez lo adeudado
por la devolución de lo ilegalmente descontado en base al primer ERE fraudulento
anulado por las demandas de la CSI.
La
dirección quiere que los compañeros en activo que “por diferentes motivos” (no
nombró las amenazas, pero no encontramos ningún otro motivo que lleve a alguien
a no ejercer en los tribunales el derecho a reclamar lo que le descontaron
ilegalmente que la CSI se ganó para todos) no van a reclamar en los tribunales,
puedan recuperar de otra manera lo adeudado.
La
dirección quiere evitar la excesiva judicialización de las relaciones laborales
en Liberbank.
La
dirección pretende retrasar el pago de lo adeudado para no verse obligada a
dotar ahora toda la deuda generada por este motivo (que, por cierto, ya tendría
que haber sido dotada cuando el Tribunal Supremo confirmó la nulidad del ERE,
cosa que no hizo porque recurrió al Tribunal Constitucional, en un recurso a
todas luces irracional). Aun así, la dirección no sabe si el auditor validará
esta iniciativa para no efectuar la dotación completa, pero por si acaso, van a
ver cómo pueden intentarlo (sic).
Desde la CSI objetamos que la dirección
podría haber hecho cualquier oferta colectiva o individual de este tipo a lo
largo de estos años de recursos, contrarrecursos, amenazas a los trabajadores,
zancadillas a quienes peleábamos contra todos sus atropellos y que, además, la
firma sindical no era necesaria para ninguna de esas posibles iniciativas, ni
lo es para la que ahora propone conseguir de prisa y corriendo, por lo que, en
caso de ser ciertas sus beneméritas intenciones (cosa que, obviamente, no nos
creemos), no nos necesitaba para nada a
los sindicatos, a lo que la dirección contestó que lo que quería era el “apoyo
moral” de los sindicatos que valdría, según ellos, para convencer a los
trabajadores de la bondad de esa iniciativa. Para no creer (salvo bajo los efectos
de la ayahuasca): la dirección de Liberbank pide el apoyo moral de los
sindicatos, algo que, en el caso de los sindicalistas firmantes de los
recortes, será debería ser más bien el “inmoral apoyo”.
Con todo lo anteriormente relatado, para
la CSI son radical y absolutamente falsas las razones esgrimidas por la
dirección para recabar la firma sindical en esta iniciativa que podría llevar a
cabo sin necesidad ninguna de nuestra firma.
Particularmente vomitiva e insultante
resulta la argumentación de que la dirección quiere devolver el dinero que
descontó ilegalmente a los compañeros en activo que decidan no reclamar en los
tribunales.
La dirección no quiso ni quiere devolver
nada a ningún trabajador (más bien al contrario) y lo que busca, con esta nueva
triquiñuela, es una herramienta para entorpecer en lo posible las reclamaciones
en los tribunales, alegando que, según reconocen los propios sindicatos, su
situación contable no permite el pago de lo que nos debe y alegando también una
inexistente buena voluntad reflejada en esta propuesta de pago aplazado.
Además, cara a futuros recortes, el que,
de nuevo, los sindicatos firmantes (la UGT y otros que ayer ya estaban haciendo
calentamientos de muñeca) reconozcan la difícil situación de la entidad que no impide,
sin embargo, el pago de dividendos, supone una de las mejores herramientas de
las que la dirección dispone en esta atropellada carrera de atropellos,
mentiras y gestión desastrosa que nos ha tocado padecer por culpa de estos
incompetentes (cómo mínimo) personajes que nos dirigen.
Por lo tanto, disfracen como quieran
disfrazar este nuevo conejo con mixomatosis que extraen de su apolillada
chistera, desde la CSI no vamos a avalarlo: somos un sindicato, no los coros y
danzas del sindicalismo del régimen.
Seguiremos
informando.
13
de junio de 2018
Hoy, miércoles 13 de junio, a las 6 de
la tarde, asamblea de trabajadores en el Centro Municipal Pumarín Sur-Gijón