08 abril 2013

Cierre de Oficinas, un chantaje intolerable



Menéndez toma rehenes para imponer su plan de ajuste

Cierre de Oficinas, un chantaje intolerable

Fondos Buitre, Abogados Carroñeros, Directivos como Hienas ¿Estamos en una empresa, en el Parque de la Naturaleza de Cabárceno o en un programa de Félix Rodríguez de la Fuente?


Al día siguiente de la representación teatral de Madrid en la que la dirección se limitó a repetir lo que ya sabíamos por la prensa acerca de las generalidades del plan de ajuste que tienen intención de aplicarnos, esta misma dirección comunica a los sindicatos una relación de 86 oficinas que, sin fecha concreta pero en todo caso antes de final de año, tiene pensado cerrar.

Como ya se ha publicado, de dichas 86 oficinas, donde trabajan 190 personas,  49 pertenecen a Cajastur (con 103 trabajadores), 29 a CCM (con 69 trabajadores), 4 a Caja Extremadura (con 8 trabajadores) y 4 a Caja Cantabria (con 8 trabajadores).

No es casual, ni mucho menos, que el anuncio del cierre se efectúe sin acompañarlo de un plan de reubicación de los compañeros afectados, plan que, lógicamente, debería estar preparado, como mínimo, desde octubre del año pasado, fecha en que la dirección pretendió aplicarnos su brutal proyecto de recortes, más aún si según repiten una y otra vez los portavoces presidenciales, Menéndez (el Hombre que Sólo Cobra 31.000 Euros al Mes) en su infinita bondad, no pretende despedirnos (ahora) a ninguno de nosotros (después de recortarnos el salario y mandarnos una temporada al paro, ya veremos).

Conociendo al personaje y a sus lacayos como los conocemos después de tantos años de sufrir sus inmorales estrategias, era de esperar este tipo de sucias maniobras (y más que vendrán, estamos seguros) con las que, jugando con el lógico miedo al futuro de los compañeros afectados y con la natural zozobra que produce el anuncio del cierre de oficinas sin que se presente un plan que garantice el puesto de trabajo de los compañeros que trabajan en ellas, pretenda utilizarlos como rehenes en el proceso de supuesta negociación con el que pretende llevar a cabo sus aviesas intenciones. Sin ninguna duda, este es otro paso más en la estrategia del chantaje y la intimidación con la que pretende liquidar nuestros empleos mientras se blinda en su sillón de Banquero Privado e intenta sepultar las barbaridades de su nefasta gestión por las que, esperamos, tarde o temprano, tendrá que responder.

Como es obvio, una vez  que nos fue comunicada la relación de oficinas a cerrar, hemos exigido a la dirección medidas de reubicación de los compañeros afectados, obteniendo la callada por respuesta.

En todo caso, damos por sentado que la pelea por la defensa de los puestos de trabajo de todos nosotros va a ser larga y dura. Nos enfrentamos a personajes sin ningún escrúpulo, que mienten con absoluta desfachatez y que utilizan su inmenso poder de la forma más canalla posible.

Ahora es el momento de que todos los trabajadores estemos unidos en la movilización en defensa de nuestro futuro y el de nuestras familias, más allá de cualquier tipo de diferencia: lugar de trabajo, caja de procedencia, o afiliación (o no afiliación) a un determinado sindicato. Es la hora de que no permanezcamos parados mientras estos indeseables destrozan nuestras vidas.

Por nuestra parte, en ello estamos.

Ánimo y a por ellos, que son pocos y  muy cobardes.

8 de Abril de 2013