CONCENTRACIÓN FRENTE AL AUDITORIO
Pedimos
disculpas por no haber podido elaborar una circular propia sobre la concentración
de ayer, debido a las múltiples tareas del sinvivir que llevamos.
Adjuntamos
crónica publicada en Elcomentario.tv sobre este mismo tema
Manuel Menéndez, el banquero de la PSOE
que privatizó Cajastur, recibe el
emocionado homenaje de la sociedad
asturiana en general
y de los trabajadores de la Caja en
particular
Ayer,
en la tarde noche, tuvo lugar en el Auditorio de Oviedo un emotivo acto, previo
a la entrega de los premios Príncipe de Asturias, en el que, con la presencia
del Oviedín del Alma, la Asturias Mostrenca y Casposa y parte de la España de
Charanga y Pandereta, se rindió homenaje a la figura – escurrida y cerúlea- de
Manuel Menéndez, aprovechando la calificación de Bono Basura que ese mismo día
le adjudicaba Moody,s a Liberbank, entidad que con tanto provecho preside y
que, bajo su batuta, se ha convertido en el asombro del mundo financiero y el
pasmo de las agencias de calificación.
El
modesto homenajeado, que según Cuartas, corre la maratón en hora y diez minutos
al lado de Alonso el Cuellicorto, interpreta magistralmente la Sinfonía en sol
menor Nº 25 de Mozart a la zambomba, habla treinta idiomas de los que entiende
cuatro, está reescribiendo el Códice Calixtino con una pluma de pavo real del
Parque Isabel La Católica y, en sus ratos libres, dirige de forma altruista un
hospital de leprosos en el barrio de Cholón en Ciudad Hochiminh, rehusó recibir
las alabanzas y parabienes de un nutrido grupo de trabajadores de Cajastur que
le esperaban a la puerta del Auditorio bajo la vigilancia de un aparatoso
despliegue de diferentes cuerpos policiales que tenían como misión evitar que
se desbordaran las pasiones y que la rendida admiración de dichos trabajadores
derivara en escenas de histeria incontenible y arrebato místico delirante.
Aún
está sin resolver el misterio de la forma de acceso al Auditorio del Banquero
Filantrópico, para lo que se barajan varias posibilidades como son la llegada
reptando por la red de alcantarillas de Oviedo, el descenso desde un helicóptero
en la terraza del edificio y la pernoctación desde el día antes en un camastro
de campaña instalado en los aseos de la cafetería anexa.
Un
tanto decepcionados por no poder saludar de cerca al homenajeado, los
trabajadores de Cajastur interpretaron, al ritmo del Coro de los Esclavos
Hebreos de Nabucco, una serie de coplillas populares en forma de pareado
asonante, de las que recogemos alguna:
Manolo, Manolito, a la calle tú solito
Manolo, Manolo, hazte un ERE p’a ti solo
Manolo, Manolín, vamos quitate el sueldin
Bono Basura, por culpa de un caradura
Qué pasa, qué pasa, qué pasa con
Menéndez,
que coge nuestra Caja, nos la hunde y
nos la vende
Según
nos informan desde allende Pajares, homenajes populares de este tipo podrían
estar preparándose en otros puntos de la geografía española como Santander,
Badajoz y Cuenca.