Reunión en Madrid
LA DIRECCIÓN SE NIEGA A RETIRAR
EL BRUTAL PLAN DE AJUSTE
La primera parte de la reunión celebrada hoy en Madrid tuvo como
objetivo definir la composición de la mesa para otras futuras reuniones. En
este punto la CSI manifestó que no
estabamos ahí por la generosidad de nadie, sino porque así lo decidieron los compañeros
de la red de oficinas de Asturias con su voto, que tienen que ser convocados los
representantes del sindicato STC que también cuentan con representación en
Asturias y que la estrategia de intentar provocar un enfrentamiento entre los
tres sindicatos minoritarios (APECASYC, CSI y STC) al asignarles dos
representantes a repartir entre todos, cuando lo lógico es que cada sindicato
tuviera un representante como mínimo, había resultado un fracaso.
Por acuerdo de todos los sindicatos se comunicó a la dirección que no se
puede excluir a ninguna organización con representantes votados por los
trabajadores de las reuniones, cosa que no tuvieron más remedio que aceptar.
Una vez solventado este tema, la dirección (por medio un miembro del
bufete de abogados que, a tanto el despido, les representa, ya que al parecer
los múltiples jefes, vicejefes y subjefes que pueblan el organigrama de
Liberbank no reunen entre todos la capacidad necesaria para abordar un tema
como este), manifestó su intención de llevar adelante su plan de ajuste, con la
penosa coletilla de siempre (estamos abiertos
a la negociación y a estudiar contrapropuestas por parte de los sindicatos,etc.,
etc )
Por parte de la CSI,
manifestamos que nosotros obedecíamos al mandato de la Asamblea de Trabajadores
(cuya resolución leimos integramente), por lo que exigíamos la inmediata
retirada del plan de recortes y despidos, y también dejamos clara nuestra total
oposición a la idea de que lo que ha planteado la dirección es una propuesta de
negociación cuando en realidad es un intolerable chantaje realizado con una
pistola en la cabeza de los trabajadores que debe tener la contundente
respuesta que se merece.
En nuestra intervención
insistimos en lo que supone para los trabajadores y sus familias las
intenciones del equipo directivo y exigimos que quienes han llevado a las cajas
a la actual situación paguen por ello y no escapen impunes de este nuevo
atropello que intentan perpetrar. Dejamos claro que ni nos creemos sus cifras
ni nos tragamos sus mentiras acerca del verdadero alcance de los recortes que
pretenden aplicar.
La intervención de la CSI
no sentó demasiado bien al representante de la patronal que afirmó que él no admitía amenazas ni insultos, a lo que
le replicamos que quienes hemos sido insultados y amenazados (muy gravemente
por cierto) éramos los trabajadores.
Por parte del resto de los sindicatos, con mayor o menor énfasis, se
manifestó la oposición a los planes de ajuste.
La dirección planteó una nueva reunión para finales de la semana que
viene.
A la hora de redactar el acta se negaron taxativamente a que se
reprodujese el acuerdo de la Asamblea de Trabajadores celebrada en Gijón, como
nosotros pretendíamos, por lo que CSI no firmó dicho acta.
Resumiendo: la dirección no
retira sus planes de brutales recortes de salario y de despidos a medio plazo,
pero ante la movilización de los trabajadores y los graves problemas que está
teniendo en diferentes ámbitos se toma un tiempo para seguir con su campaña de
falsedades acerca de lo que realmente pretende y para intentar romper la unidad
sindical y movilizar los apoyos políticos y mediáticos que le quedan.
Por todo esto, consideramos
que los trabajadores estamos haciendo lo correcto y que debemos continuar
cumpliendo lo acordado en la Asamblea, desde la unidad de acción y con la
participación de todos.
Por nuestra parte, en ello estamos
Ánimo y adelante
Ánimo y adelante
24 de Octubre de 2012