Reunión con el presidente
MUCHAS
MAS DUDAS QUE CERTEZAS
Acaba de finalizar la
reunión que hemos mantenido con el presidente de Liberbank. Por parte de la empresa estuvieron presentes, además,
el director de Gestión de Recursos Humanos y el director del Área de Medios.
Como sabéis, dicha
reunión tenía como objetivo “informar sobre las
líneas generales de actuación futura de la Entidad”. En ese sentido, el
presidente expuso la actual situación de la fusión, presentando la ruptura de
dicho proceso como algo acordado previamente entre Liberbank e Ibercaja, en
función de las necesidades de capitalización señaladas por las recientes
auditorías, señalando que los planes de futuro a presentar de manera inmediata
ya no contemplan la alternativa de una fusión, ya que dichos planes se presentaran
de forma individualizada por parte de cada entidad.
Manifestó la intención,
que ya conocíamos por la prensa, de
intentar cubrir las necesidades de capital a fecha de 30 de junio de 2013
mediante la generación de recursos por parte de la entidad, pero sin descartar
en ningún momento la necesidad de capital público, bien por no alcanzar los
recursos generados la cantidad necesaria o bien por imposición de las autoridades
españolas y europeas. También señaló que no tenía la completa seguridad de que
el plan de recapitalización a presentar a final de esta semana fuera aceptado
por dichas autoridades.
Resaltó en varias
ocasiones que la intención de la entidad era “aumentar la eficiencia sin pérdida de empleo” (quiera esto
decir lo que quiera decir, y teniendo en
cuenta lo curados de espantos que estamos en materia de bonitas palabras y promesas incumplidas).
Por nuestra parte,
dimos lectura y le hicimos entrega del siguiente pronunciamiento de la Sección
Sindical de CSI en Cajastur, mediante el que, entre otras cosas le pedimos, en
vivo y en directo, su dimisión y la de su equipo directivo
La sección sindical de CSI en
Cajastur quiere aprovechar la reunión a la que ha sido convocada por el presidente
de Liberbank para manifestar lo siguiente:
Nos negamos a que, con el socorrido
argumento de la crisis, se pretenda obviar el necesario análisis de las
iniciativas y las decisiones directivas que han llevado a nuestra entidad a la
actual situación, que, según se desprende de las necesidades de capital
reveladas por las recientes auditorías, acreditan un nefasto desempeño por
parte del equipo directivo.
Rechazamos que se pretenda poner en
pública almoneda el patrimonio de Cajastur, fruto del ahorro de generaciones de
asturianos para liquidarlo, deprisa y corriendo, en un nuevo intento de
consolidar a toda costa el poder del actual presidente, sea cual sea el
resultado del tambaleante proceso de fusión en el que nos encontramos inmersos.
Hacemos constar igualmente nuestro
desacuerdo con los procesos de
privatización a los que se ha visto sometida Cajastur y al papel que ha jugado
el equipo directivo de la entidad en dichos procesos, actuando como Caballo de
Troya de la privatización, en defensa de sus particulares intereses y haciendo
dejación absoluta de la defensa de la naturaleza de nuestra Caja, de su
trayectoria de compromiso con Asturias, de sus más de 130 años de historia y
del futuro tanto de la entidad como de los trabajadores, que hemos tenido que
asistir a todos estos cambios como meros convidados de piedra sin recibir
información ni explicación alguna acerca de los motivos y las consecuencias de
transformaciones de tanta importancia para nosotros.
Denunciamos el clima de miedo y de
amenaza que, aprovechando la actual situación, se pretende imponer entre los
trabajadores, con continuas alusiones a más recortes salariales, traslados e incluso
despidos, generando un ambiente laboral intolerable, más aún cuando es público
y notorio que no somos los trabajadores quienes hemos llevado a la Caja a su actual situación y
que nuestro compromiso profesional y personal con los clientes y con Cajastur
no admite lugar a dudas, a pesar de la ausencia de una estrategia directiva
coherente y profesional que, adaptada a
las necesidades de estos tiempos, tenga
objetivos a medio y largo plazo más allá de buscar la rentabilidad inmediata a
cualquier precio.
Sobre los recortes salariales que
venimos sufriendo desde mucho antes de que estallara la crisis y con los que
permanentemente se nos somete a una infame guerra de nervios queremos poner de relieve el hiriente contraste
entre el empeño en recortar nuestros sueldos y la permanente estrategia de
acumulación de puestos y salarios practicada por el presidente de Liberbank,
con el agravante de la falta de transparencia en cuanto al montante de dichos
salarios que, a nuestro entender, deberían ser públicos y publicados, más aún
dado el carácter político de los cargos que generan dichas retribuciones.
Recordamos también la injusticia que se ha cometido con las compañeras de la
limpieza, a las que se ha recortado sus salarios de una manera brutal y la
sangrante situación de los trabajadores de CEICA, empresa participada por la Caja , que llevan meses sin
trabajo efectivo, sin cobrar sus salarios y sin que ni siquiera se les reciba
para poder negociar una solución para ellos y sus familias.
Resumiendo y para finalizar: en
1995, cuando el actual presidente llegó a dicho puesto Cajastur era una entidad
con más de 100 años de compromiso con Asturias, que creaba empleo estable y
dignamente retribuido (una riqueza social de primer orden en una región que
figura a la cabeza de las estadísticas de desempleo) y que, mediante la
actividad económica que generaba y mediante la Obra Social y
Cultural, efectuaba una contribución inestimable al desarrollo de la región.
Hoy, más de 15 años después, Cajastur se ha
transformado en un banco privado de dudoso futuro, con una Obra Social y
Cultural en extinción y unas relaciones laborales más propias de otros
escenarios históricos y geográficos.
Para la Corriente Sindical
de Izquierda, este deterioro de la situación de la Caja es producto directo de
una gestión directiva absolutamente nefasta que no debe prolongarse ni un
minuto más, por lo que, en consecuencia, exigimos la dimisión inmediata de
Manuel Menéndez y de todo su equipo directivo.
10 de octubre de 2012