Lo sucedido en la jornada de hoy deja bien claro, por si alguien tenía alguna duda, la falta de honestidad de la empresa y su intención de recurrir a todo tipo de triquiñuelas para hacer pasar por negociación su intención de aplicar a como dé lugar el brutal e injustificado plan de ajuste presentado en octubre.

La reunión había sido convocada por la propia dirección a las 13,30 horas. A esa hora, incumpliendo su compromiso de presentar una nueva propuesta por su parte, comunican a la representación de los trabajadores que recogen una propuesta conjunta que presentan CCOO y UGT y suspenden la reunión, convocando otra para las 17 horas.

Esta reunión que debía celebrarse a las 17, no dio comienzo, por voluntad de la dirección, hasta las 19,30. Una vez comenzada, se presentó la nueva propuesta de dicha dirección que, salvo algún cambio cosmético, es la misma que la conocida hasta ahora, sin modificaciones en lo esencial, con los recortes de horarios, salarios y suspensiones temporales de empleo conocidos.

Las dos horas de reunión de la tarde han consistido en un tira y afloja sin avance ninguno y con una estrategia deliberada de CCOO y UGT de dejar al margen al resto de la representación de los trabajadores. En un momento dado, los representantes de dichos sindicatos se retiraron de la mesa para estudiar la oferta de la empresa sin contar con los demás sindicatos. Dicho estudio no supuso ningún cambio en la situación.

La dirección, siguiendo con su estrategia de guerra de nervios y desgaste de los trabajadores por medio de esta serie de reuniones sin otro propósito que dar visos de legalidad a una utilización torticera e inmoral de la reforma laboral basada en datos manipulados, ha vuelto a convocar otra reunión para mañana a las 13 horas.

En resumen: Menéndez sigue empeñado en sacarnos 100 millones de euros al año para financiar su banco privado, mediante brutales rebajas salariales y suspensiones de empleo temporales (de momento), alegando problemas de viabilidad de la empresa, que nosotros negamos rotundamente. Por otro lado, señalamos la inmoralidad de que, en un país con más de 6 millones de parados y con muchas familias en situación de auténtica miseria sin percibir ningún tipo de prestación, este individuo pretenda además ahorrar costes de personal cargándolos a las prestaciones de desempleo de todos nosotros, con un coste anual de más de 10 millones de euros para las arcas públicas. Esperamos que las autoridades tomen nota de esta estafa y obren en consecuencia.

Seguiremos informando

7 de Mayo de 2013