El guirigay sindical que perjudica a
los trabajadores y beneficia al Consejero Delegado
¿La liberbankarización ha venido y
nadie sabe cómo ha sido? Nosotros, sí
Guirigay: gritería
y confusión que resulta cuando
varios hablan a la vez o cantan
desordenadamente
Hace unos
días, nos enterábamos mediante circular de que un grupo de sindicatos, muy
sueltos de cuerpo, convocaban movilizaciones (así en abstracto, sin calendario,
ni objetivos) y que, en un acto de generosidad que les honra, nos invitaban al
resto de los sindicatos a adherirnos a esa indeterminada iniciativa.
En nuestra
ingenuidad, habíamos pensado que el hecho de que ya se hubieran realizado las
elecciones sindicales en la mayoría de los territorios de la entidad, podría
propiciar una estrategia unitaria para enfrentar la situación que vivimos y
para afrontar el proceso de homologación salarial que tenemos pendiente, donde
hay que resolver problemas cada día más acuciantes como la congelación salarial
de los compañeros procedentes de Cajastur y la falta de equiparación de los
puestos de responsabilidad, tanto los antiguos como los generados por el nuevo
modelo de oficinas.
Vanas
ilusiones las nuestras, visto lo visto.
Por otro
lado, nos alegramos de que en la habitual lluvia de circulares diarias se
utilice el término liberbankarización para definir el resultado de la
aplicación de las nefastas políticas del actual consejero delegado (cuyos
mandamientos, como ya dijimos hace mucho cuando tantos callaban, se resumen en
dos: todo para mí, nada para vos), pero echamos en falta, en esas diatribas,
(llamadnos pejigueras) algo más de concreción y claridad.
Y, nos
preguntamos si no sería adecuado que toda la representación sindical se
pronunciase unitariamente denunciando el hecho de que cada minuto que el actual
consejero delegado permanece en su puesto es un minuto perdido para el futuro
de Unicaja y, en consecuencia, exigiendo su inmediata dimisión.
Para eso
pueden, al igual que para esas indefinidas movilizaciones, convocarnos cuando
quieran.
Ahí
estaremos, a pesar de que no se nos olvida que la inmensa mayoría de los
atropellos que el actual consejero delegado de Unicaja llevó a cabo tanto en
Cajastur, como en Liberbank, incluyendo los ERES fraudulentos, tuvieron el
apoyo de una mayoría sindical que, a quienes nos oponíamos a dichos abusos, nos
acusaban, entre otras lindezas, de querer hundir la entidad.
Y tampoco
nos olvidamos de que el ERE de Unicaja fue una fiel reproducción de los ERES
fraudulentos de Liberbank: postureo sindical con movilizaciones de teatrillo
(que nos costaron un dinero a quienes fuimos a la huelga) para al final, firmar
lo que el consejero delegado quería desde un principio, con el agravante de
dejar por escrito y avalado por la mayoría sindical firmante el precedente de
que en caso de que las peticiones para abandonar la entidad voluntariamente no
alcanzasen la cantidad acordad, la empresa podría despedirnos en base a sus
propios informes acerca de nuestro desempeño laboral. Así, tal cual, sin
ponerse colorados ni nada.
Como hicimos
en ese momento y a pesar de los muchos pesares, la CSI no va a ser pieza de
discordia en la convocatoria de movilizaciones.
Ahí
estaremos, porque motivos hay de sobra para convocarlas.
Y si, ya
para nota, se convocan como hacemos en Asturias, desde la unidad que representa
en nuestro caso el comité de oficinas, mejor que mejor.
A seguir en
la pelea.
La de
verdad, no la de las grandilocuentes declaraciones que acaban en casi nada.
25 de mayo
de 2023
P.D. Próxima
circular: Evaluando al Consejero Delegado
(II) “El edificante (nunca mejor dicho) caso de La Talá, un pelotazo urbanístico
que salió mal sin que a los especuladores les costara un solo euro. Ya se
encargó Liberbank de asumir las pérdidas”