Ampliación
de Capital: continúa el expolio
La
CSI (Corriente Sindical de Izquierda) denuncia la ampliación de capital de
Liberbank como una maniobra a favor de especuladores extranjeros, una huida
hacia adelante del equipo directivo del banco en defensa de sus particulares
intereses y un paso más en el proceso de privatización/liquidación de la Caja
Ante
el proceso de ampliación de capital de Liberbank la CSI manifiesta que dicha
operación constituye un paso más en el proceso de privatización/liquidación de
Cajastur, un expolio sin precedentes a la sociedad asturiana, mediante el cual
se nos arrebata la entidad financiera de referencia para los asturianos y se
saquea el patrimonio acumulado durante más de ciento treinta años para ponerlo
en manos de especuladores extranjeros que, con la complicidad del equipo
directivo de Cajastur/Liberbank se apoderan de la caja de todos los asturianos.
Con
esta nueva maniobra, el equipo directivo de Cajastur/Liberbank defiende
solamente sus intereses económicos y sus ambiciones personales, como lleva años
haciendo, sin que todavía haya rendido cuentas sobre su nefasta gestión, que ha
supuesto llevar a la Caja a la actual situación, totalmente contraria a su
propósito fundacional y a su trayectoria de compromiso con Asturias.
Con
esta ampliación de capital, que diluye el control de las cajas sobre Liberbank
y refuerza el poder del equipo directivo
y sus socios, dicho equipo directivo intenta evitar la posibilidad de que, más
tarde o más temprano, se le pidan cuentas sobre su actuación como caballos de
troya de la privatización/liquidación desde que dirigían Cajastur, incumpliendo
su obligación, astronómicamente retribuida, de velar por los intereses de la
caja que dirigían.
La
CSI recuerda que, entre otras irregularidades, la dirección de Liberbank ha
visto anulado por la Audiencia Nacional un ERE fraudulento, por el que deben a
los trabajadores 67 millones de euros, está perdiendo cientos de pleitos por
comercializar deuda subordinada y participaciones preferentes y está siendo
investigada en los juzgados por la recompra de La Talá, una finca no
urbanizable, pagando por ella 47 millones de euros a Nozar Masaveu, después de
que se viniera abajo el pelotazo urbanístico que se proyectaba en ella.
Para
la CSI, resulta particularmente vergonzoso que, en plena campaña electoral, los
políticos asturianos no hayan pedido explicaciones sobre una operación de tanta
transcendencia y con tantas implicaciones de futuro para la economía de la
región.
Cuánto
más falta hace una entidad como la Caja, comprometida con Asturias y con la
difícil situación que están viviendo los asturianos, los directivos de
Cajastur/Liberbank, continúan con su desmantelamiento y su venta a precios de
saldo sin que por parte de quienes tienen la obligación de velar por los
intereses colectivos se tome ninguna medida para evitar este saqueo a la
riqueza colectiva.
Por
nuestra parte, en ello estamos
21
de mayo de 2014