Es la hora de la coherencia sindical: en la negociación y en la pelea por nuestros derechos, por nuestros empleos y por nuestro futuro
La CSI no va a regalarle argumentos a la empresa para avalar la campaña de intoxicación que busca responsabilizar a la representación de los trabajadores de los incumplimientos de dicha dirección en la mesa negociadora y tampoco va a dar excusas prematuras a quienes puedan tener la tentación, como otros procesos similares que nos han tocado vivir, de romper la unidad sindical firmando acuerdos perjudiciales para los trabajadores.
Mañana martes va a tener lugar la reunión convocada por la empresa después de haber desaprovechado la primera reunión de este periodo informal de negociación (y, en este caso, nunca mejor dicho lo de informal) para cumplir con su obligación de presentar su propuesta y después de haber suspendido, sin motivo justificado alguno, la que se había comprometido a convocar para el jueves pasado.
Desde un primer momento, la dirección ha pretendido descargar la responsabilidad del incumplimiento de sus obligaciones en la desunión sindical, un mero pretexto que sólo busca deslegitimar a los sindicatos para que afrontemos unas negociaciones tan trascendentes como éstas en una posición de debilidad respecto a nuestros compañeros que, hoy más que nunca, tienen derecho a exigirnos capacidad, coraje y compromiso en la defensa de sus derechos y deben tener confianza en que vamos a estar a la altura de las circunstancias, no vamos a traicionarles ni vamos a avalar con nuestra firma acuerdos tan intolerables como los que, en su momento tuvieron el respaldo de una mayoría sindical tanto en Cajastur como en Liberbank.
Para quienes venimos de Liberbank, ninguna de estas artimañas intoxicadoras nos suena a novedad, más aún cuando la abogada que ejerce de portavoz de la empresa es la autora de la frase (muy definitoria del nivel moral en que nos movemos) “con amenazas de despido se negocia mejor”
Así, tal cual.
A nosotros no nos lo contaron.
Lo escuchamos en vivo y en directo con estos oídos que se han de comer los gusanos, y por eso nos esperamos cualquier cosa y no nos sorprendemos por casi nada.
Por otro lado, como hemos manifestado, no estamos de acuerdo con la manera en que se constituyó la representación de los trabajadores en la mesa de negociación ya que, como siempre hemos defendido, consideramos que cada sindicato tiene que tener al menos un representante en dicha mesa, respetando, lógicamente, tanto el peso de la representación de cada uno como el derecho de los sindicatos mayoritarios a tener varios representantes y varios asesores para dar cabida a todos sus representantes territoriales.
Este criterio de no discriminar a ningún sindicato lo mantenemos también donde somos el sindicato más votado, la red de oficinas de Asturias, impulsando el comité de empresa como órgano de representación unitaria de los trabajadores y apostando permanentemente por la unidad en la pelea contra los continuos atropellos de la dirección.
No es a nosotros precisamente a quienes se nos puede reprochar la ruptura de la unidad sindical en anteriores procesos, sino a quienes la rompieron firmando las mismas medidas a las que nos oponíamos todos y contra las que se habían convocado movilizaciones, concentraciones y huelgas.
Afortunadamente en 2020, por primera vez desde 2013, los recortes fraudulentos e inmorales impulsados por la dirección de Liberbank no contaron con la firma de la mayoría sindical y fueron anulados por los tribunales gracias a una demanda conjunta de todos los sindicatos.
Esperemos que ese sea el camino a seguir en adelante.
Una vez llevada a cabo la absorción de Liberbank por parte de Unicaja y, a pesar de los intentos un tanto patéticos, pero no por ello menos inquietantes, por parte del consejero delegado (que liquidó Cajastur, enterró Liberbank y batió todos los records de atropellos a los trabajadores y que, conviene recordarlo, pese a todas sus maniobras, no consiguió tenernos de rodillas y derrotados como pretendía y al que no tenemos ningún temor y ningún respeto) de dirigir este proceso a su desfachatada manera, desde la CSI consideramos que es el momento de un acuerdo que contemple tanto las expectativas de quienes quieran optar por abandonar la entidad (de forma voluntaria, obviamente) como la de quienes tienen muchos años por de trabajo por delante y no pueden seguir siendo, en el caso de los trabajadores procedentes de Liberbank y especialmente los compañeros ingresados en Cajastur después del 25 de enero de 1.999, los eternos perjudicados por un modelo de gestión que no tiene ningún sentido y que ha de ser liquidado de una vez.
En base a estas reflexiones, que consideramos oportuno trasladar a todos los compañeros, y, reiterando lo dicho al principio de esta circular (“la CSI no va a regalarle argumentos a la empresa para avalar la campaña de intoxicación que busca responsabilizar a la representación de los trabajadores de los incumplimientos de dicha dirección en la mesa negociadora y tampoco va a dar excusas prematuras a quienes puedan tener la tentación, como otros procesos similares que nos han tocado vivir, de romper la unidad sindical firmando acuerdos perjudiciales para los trabajadores”) comunicamos que no vamos a presentar recurso alguno contra la composición de la mesa negociadora y que, como siempre hemos hecho, pondremos nuestro empeño en defender a todos los compañeros, en la mesa de negociación y fuera de ella, aportando la experiencia que hemos acumulado en estos largos años de lucha.
A seguir en la pelea.
04 de octubre de 2021