15 julio 2013

CCOO y UGT tienen razón



CCOO y UGT tienen razón

La verdad es la verdad, dígala Agamenón o dígala su porquero (Antonio Machado)

La verdad es la verdad, dígala Agamenón, su porquero o los mismos gorrinos que se revuelcan en sus propias heces. (Versión actualizada y referida a las infructuosas maniobras de los palanganeros sindicales para hacernos tragar sus traiciones)


Entre el diluvio de propaganda que, coordinadamente, emitieron la dirección y sus cómplices sindicales para vender al mundo mundial las bondades del acuerdo del 25 de junio que, según dicha sarta de mentiras, suavizaba las medidas impuestas unilateralmente por la entidad una vez cerrado sin acuerdo el periodo de consultas legalmente establecido, se deslizó seguramente por error, una verdad que es conveniente destacar por lo insólito que resulta que estos personajes, por una vez, no mientan.

Decía el empleado de recursos humanos que redacta las circulares conjuntas de Los Infames (CCOO/UGT) que el acuerdo referido despejaba incertidumbres y aportaba certezas a los trabajadores.

Por nuestra parte, absolutamente de acuerdo.

La firma de este acuerdo despeja cualquier incertidumbre acerca de la remota posibilidad de que detrás todo el teatrillo montado a última hora, después de haber estado más de nueve meses tocándose ciertas partes de la anatomía que nuestra esmerada educación pública se resiste a nombrar, con el mismo guión que en el resto del sector (un par de concentraciones, varios días de huelga, acuerdo firmado de madrugada a espaldas de los trabajadores y sin que se someta a la aprobación de éstos y decreto ley por el que se da por concluido el conflicto) hubiera algo que realmente se pareciera a la intención de defender los derechos de los trabajadores y no la escenificación pactada de antemano entre las cúpulas sindicales y la dirección.

Por otro lado, también es cierto que esta firma aporta certezas varias a los trabajadores:

La certeza de que, debido a la dureza de los recortes propuestos por la empresa y su absoluta falta de justificación, era imposible para Los Infames firmar durante el periodo oficial de negociación, por lo que, una vez incorporado a última hora a la mesa de negociación el máximo mandatario de COMFIA CCOO, presidente del club de fans de Miguel Blesa y reconocido urdidor de múltiples traiciones a los trabajadores (¿A cambio de qué? ¿Tú qué crees?), decidieron unos y otros someternos al desgaste de las medidas impuestas unilateralmente por la dirección para que después resultase más vendible un acuerdo que supuestamente mejorase el atraco inicial.

La certeza de que las huelgas convocadas por CCOO y UGT estaban pactadas con la dirección, que se ahorró con ellas en torno a dos millones de euros de salarios, lo que, una vez descontadas las comisiones a pagar, deja un buen pico de nuestros sueldos para financiar las ambiciones de banquero privado de Menéndez. (¿No hubo gratificación por conseguirle este ahorro metiéndonos la mano en la cartera a los trabajadores? ¿Nos atracan gratis, sólo por el gusto de servir a sus amos? Peor nos lo ponen).

La certeza de que tenemos que oponernos de todas las formas y con todos los recursos a nuestro alcance a los propósitos de la dirección y sus lacayos, ya que estos recortes son parte de un plan de demolición controlada de nuestras cajas que no se detienen aquí y que ponen en peligro el empleo de todos.

La certeza de que la dirección no tenía ninguna garantía (más bien al contrario) de poder sacar adelante su brutal plan de ajuste incluso con la nefasta reforma laboral y que, para tener algún tipo de argumento legal frente al conflicto colectivo planteado por los sindicatos no adictos, mediante esta sucia maniobra, les compra a Los Infames un acuerdo para poder aducir la firma de la mayoría sindical como supuesto aval para este atraco a los trabajadores. Esperamos que los tribunales no convaliden semejante barbaridad.

La certeza de que en Asturias, tanto los firmantes del acuerdo, Eduardo Pérez Payo y José Luis González Valdés, como el resto de los dirigentes de UGT y CCOO que callan como mercenarias del amor (otra vez nuestra esmerada educación pública nos impide ser más explícitos) nos deben, entre otras muchas cosas, una explicación a todos los trabajadores, no solamente a sus afiliados, ya que su complicidad en esta traición nos afecta a todos.

Y, por último, la certeza de que no podemos permitirnos la depresión ni el desaliento, por que sería abandonar una pelea en la que nos jugamos mucho y en la que, en nuestra opinión, vamos por buen camino para que, por esta vez y que sirva de precedente, ganemos los buenos.

Ánimo  y recuerda:

Concentración contra el brutal plan de ajuste de Menéndez
 y la traición de CCOO y UGT a los trabajadores de Liberbank
Miércoles 17 de julio
6 de la tarde
C/Santa Teresa 15 bajo (frente a los locales de CCOO)
(Oviedo)
Ahí nos vemos


15 de julio 2013
P.D.:
Próxima circular
Masacre en Asturias
(cifras y datos de los amargos frutos de la traición de CCOO y UGT)