07 junio 2017

Segunda reunión nuevo ERE fraudulento. Nada nuevo y nada bueno: la dirección sigue planteando recortes salariales y movilidad geográfica ilimitada (¿conseguirá la complicidad sindical que necesita?)



Segunda reunión nuevo ERE fraudulento

Nada nuevo y nada bueno: la dirección sigue planteando recortes salariales y movilidad geográfica ilimitada (¿conseguirá la complicidad sindical que necesita?)

Hoy ha tenido lugar la segunda reunión convocada por la dirección para comunicarnos sus intenciones (nada buenas, obviamente) respecto a la continuidad del plan de ajuste que llevamos padeciendo desde hace cuatro años, una vez que, a finales de este mes, finaliza el ERE fraudulento actualmente en vigor.

La dirección sigue manteniendo sus intenciones que, una vez desprovistas de la habitual verborrea pseudotécnica que pretende hacer pasar por verdad absoluta lo que sólo es el reflejo de la voluntad de seguir apretándonos las tuercas a los trabajadores, se resumen en el siguiente párrafo:

“La dirección de Liberbank pretende que los trabajadores paguemos con los recortes salariales hasta finales de 2019 la posible devolución del importe ilegalmente descontado mediante el primer ERE fraudulento, los despidos y los traslados forzosos a cientos de kilómetros generados por la movilidad geográfica ilimitada y forzosa y los habituales dispendios fruto de su nefasta gestión. Además, pretenden también que, después de cuatro años de ERES fraudulentos, aceptemos que son necesarios nuevos recortes y despidos para asegurar la viabilidad de la empresa, con lo que dejaríamos la puerta abierta a nuevos recortes a criterio de la dirección”

En la reunión de hoy, la empresa no ha entregado ni su oferta por escrito ni ningún tipo de documentación que acredite la supuesta necesidad de un ERE y solamente ha desarrollado ligeramente la oferta de bajas incentivadas, en el sentido siguiente:

Propone hasta un máximo de 525 despidos, con voluntariedad para el trabajador y con dos situaciones distintas:

Colectivo de trabajadores nacidos en 1956, 57 y 58 con prioridad para solicitar la medida, reservándose la empresa un 15% al que podría rechazar la medida por razones organizativas, en condiciones iguales a las de la excedencia voluntaria, pagaderas en forma de renta desde la extinción del contrato hasta los 63 años.

Resto de trabajadores (mayores o menores): la indemnización del acuerdo de junio 2016, con las particularidades fiscales de incluirse en un ERE. La aceptación de la medida, en este caso, sería a criterio de la empresa.

Por parte de la CSI, expusimos los siguientes argumentos:

Firmar la movilidad geográfica ilimitada como la del 2011 significa firmar despidos.
El acuerdo de ese año consistió en una oferta de prejubilaciones en mucho mejores condiciones que las actuales (en las que estaban incluidos los directivos de la empresa y los directivos sindicales de aquella época) a cambio de aplicarnos la movilidad geográfica ilimitada a quienes continuábamos en la empresa.
CSI denunció que se daba carta blanca a la dirección para, mediante traslados a cientos de kilómetros, obligar a muchos compañeros a aceptar la baja en la entidad dadas sus circunstancias personales y familiares, como así ocurrió.
Los sindicatos firmantes dijeron que la movilidad geográfica era voluntaria, pero que no habían puesto esa palabra en el acuerdo porque “lo daban por hecho” y que la empresa “los había engañado”.
Para completar el teatrillo, presentaron una demanda ante la Audiencia Nacional destinada al fracaso desde un primer momento. La bofetada que les dio la AN por pretender recurrir lo que habían firmado con pleno conocimiento fue antológica.
A día de hoy, tal y como hemos denunciado desde la CSI, algunos jefezuelos están amenazando con despidos y traslados a quienes no cumplan sus exigencias en el plano de la actividad comercial.
Presentada denuncia en ese sentido ante la Inspección de Trabajo de Asturias, comparecieron directivos de Liberbank que, con la hipocresía habitual, manifestaron que de ningún modo se iba a utilizar el incumplimiento de objetivos comerciales para represaliar a nadie.
Sin embargo, las amenazas de Territoriales y Jefes de Zona no han dejado de incrementarse en las últimas semanas.
Obviamente, ahora no cabe alegar engaño por parte de la empresa, ni error por parte de los sindicatos que firmen lo que la empresa pretende: firmar la movilidad geográfica ilimitada es firmar despidos para los compañeros. Ni más ni menos. 
Con el recorte del 10% hasta finales del 2019, quieren que paguemos la estafa del primer ERE y los despidos derivados de la movilidad geográfica ilimitada.
El consejero delegado de Liberbank, Manuel Menéndez, pretende que los trabajadores paguemos con los nuevos recortes salariales la devolución de lo recortado por la anulación del primer ERE fraudulento, en el caso de que el TS confirme la anulación de las medidas unilaterales previas a dicho ERE. En el caso de que el TS nos dé la razón, con el recorte del 10%, le sobraría para pagar, de nuestro bolsillo también, las indemnizaciones por los traslados y en su caso, algunos dispendios tan difícilmente justificables como los conocidos hasta ahora: pagos a Ausbanc, a políticos de postín y familiares directos de ellos, a antiguos sindicalistas devenidos como pago a sus traiciones en directivos de la empresa, aumentos de sueldo al Consejero Delegado, dietas millonarias a los miembros del Consejo de Administración por su desconocida labor, obras en oficinas para liquidar la marca comercial Cajastur (uno de nuestros mejores activos), patéticas y carísimas ocurrencias como el robot Liberfácil. 
Por otro lado, hablando de recortes: ¿para cuándo una equiparación, no en recortes, sino en salarios de los trabajadores de Cajastur con el resto de los trabajadores de Liberbank?
A partir del acuerdo del 25 de enero de 1999, los trabajadores de Cajastur hemos sufrido una pérdida salarial muy importante, sobre todo en el caso de los compañeros ingresados desde esa fecha, que sufren una congelación salarial desde su fecha de entrada.  Este acuerdo, firmado por UGT y USO hizo que llegásemos al día de hoy en unas condiciones salariales mucho peores que otros territorios, por lo que este recorte adicional del 10%, inadmisible para cualquier trabajador, lo es aún menos para quienes ya llevamos muchos años padeciendo la teoría de la austeridad salarial ajena de Manuel Menéndez.
La propuesta de bajas incentivadas respecto a un colectivo que, en teoría, ya estaría incluido en los planes de excedencias voluntarias, pendientes de desarrollar por parte de la empresa.
Antes que nada, la dirección debería aclarar si da por terminado el proceso de excedencias pactadas y en qué situación quedan quienes, estando incluidos en dicho proceso, todavía no han sido llamados por la dirección o, en su caso, han mantenido la preceptiva entrevista, pero no han firmado la adhesión a dicha excedencia.  
Por todo esto, quien firme un acuerdo de este tipo estaría nuevamente convalidando la teoría de la dirección de que la viabilidad de Liberbank depende de la posibilidad de despedir y recortar salarios, con lo que deja la puerta abierta y la justificación preparada para nuevos recortes y nuevos despidos.
Próxima reunión: viernes, a las 12 de la mañana.

Seguiremos informando.

07 de junio de 2017